¿Son seguros los agonistas GLP-1 en niños y adolescentes?

En Estados Unidos, la FDA ha aprobado el uso de liraglutida para el tratamiento de DBT-2 en niños y adolescentes, así como de liraglutida, semaglutida, dulaglutida y exenatida para obesidad y DBT-2. Su uso se ha extendido en esta población desde el año 2020 al 2023.

Con el objetivo de estudiar la seguridad y eficacia del uso de agonistas del GLP-1 (aGLP-1) en niños y adolescentes, se realizó una revisión sistemática con metaanálisis sobre ensayos clínicos aleatorizados realizados en niños de entre 6 y 17 años con antecedentes de obesidad, prediabetes o diabetes tipo 2 (DBT-2).

Se incluyeron 18 ensayos clínicos (11 en obesidad, 6 en DBT-2 y 1 en prediabetes) publicados entre 2023 y 2025, con un total de 1402 participantes (838 bajo tratamiento de aGLP-1 y 564 con placebo) con una media de edad de 13,7 años, 59,3% mujeres. Se halló que los aGLP-1 redujeron en forma significativa la hemoglobina A1c (HbA1c), la glucemia en ayunas, el peso corporal, el índice de masa muscular (IMC), el percentil y la desviación estándar de IMC, así como la presión arterial sistólica. Los síntomas gastrointestinales fueron significativamente más frecuentes entre quienes estaban bajo tratamiento con aGLP-1, mientras que las tasas de discontinuación, depresión, ideación o conductas autolíticas, y trastornos hepatobiliares no presentaron diferencias significativas con respecto al grupo placebo.

La revisión presenta varias limitaciones y son necesarios estudios longitudinales para establecer los efectos a largo plazo de los aGLP-1 en esta población.