Recomendaciones y Normativas - Publicado el 21 de junio de 2019

Argentina prepara su nueva forma de etiquetado

Argentina prepara su nueva forma de etiquetado

En Argentina, como en tantos otros países del mundo, la obesidad y el sobrepeso muestran cifras alarmantes y en constante ascenso. Los últimos resultados de la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR) que se conoció hace dos meses, en base a datos de 2018, dejan constancia del aumento de la epidemia en el país.

En este contexto, la emergencia se acrecienta y desde el Ministerio de Salud de la Nación piensan en estrategias que apunten a bajar los índices de exceso de peso.

Se busca aprovechar las buenas experiencias que ya tienen otros países con el sistema de etiquetado frontal de alimentos.

En pocas palabras, se trata de que los consumidores cuenten con una ayuda simple: información clara, localizada en el frente de los paquetes de todos los alimentos, que advierta sobre el contenido real de cada uno. Si el producto tiene exceso de grasas saturadas, muestra exceso de azúcar, de sodio, etcétera.

En Chile, por ejemplo, en los últimos años se instrumentó un exitoso sistema de advertencias con formas de octógonos negros, en el frente de cada alimento, que de manera rápida y directa informa al comprador sobre los riesgos para su salud que el producto contiene.

Pese a esa experiencia favorable al otro lado de la Cordillera, este medio pudo saber que Argentina no la repetirá.

Refiriéndose al sistema de etiquetado, el ministro dejó en claro que no será sólo de advertencia como el chileno, sino que se implementará también un método informativo. El color en el que se piensa es el rojo, por ser “universalmente un color que se asocia a la advertencia”, indicó.

“Lo estamos trabajando con el Ministerio de Producción –precisó– fundamentalmente para tratar de llegar a un modelo de etiquetado frontal donde por un lado se brinde información a los consumidores en el punto de compra, pero que además advierta sobre aquellos alimentos que tienen exceso de algún nutriente crítico”, explicó Rubinstein.