Enf. Cardiovasculares - Publicado el 24 de marzo de 2023

La dieta mediterránea podría reducir casi un 25% el riesgo de enfermedad y muerte por ECV en mujeres

La dieta mediterránea podría reducir casi un 25% el riesgo de enfermedad y muerte por ECV en mujeres

Investigadores de las universidades de Sydney, Westmead y Nueva Gales, en Australia, habrían determinado que llevar una dieta mediterránea podría reducir hasta un 25% el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares e ictus en mujeres. 

De un grupo inicial de 190 estudios, los investigadores incluyeron 16 publicados entre 2003 y 2021 en su análisis de datos agrupados. En los estudios incluidos, realizados en su mayoría en EE.UU. y Europa, participaron más de 700.000 mujeres mayores de 18 años cuya salud cardiovascular se controló durante una media de 12,5 años.

Los resultados del análisis, publicados en la revista Heart, mostraron que el seguimiento estricto de una dieta mediterránea se asociaba a un riesgo un 24% menor de enfermedad cardiovascular y a un 23% menor de muerte por cualquier causa en las mujeres.

El riesgo de cardiopatía coronaria era un 25% menor, mientras que el de ictus también, aunque no estadísticamente significativo.

Se reconocen varias limitaciones en trabajo realizado, entre ellas que todos los estudios analizados eran observacionales y se basaban en cuestionarios de frecuencia de alimentos autoinformados. Además, los ajustes por factores potencialmente influyentes variaron entre los estudios incluidos.

A pesar de estas limitaciones, los efectos antioxidantes y sobre el microbioma intestinal de la dieta mediterránea en la inflamación y los factores de riesgo cardiovascular son algunas de las posibles explicaciones de las asociaciones observadas.

Además, se sugiere que los diversos componentes de la dieta, como los polifenoles, los nitratos, los ácidos grasos omega-3, el aumento de la ingesta de fibra y la reducción de la carga glucémica, podrían contribuir en forma independiente a mejorar el perfil de riesgo cardiovascular.

Los resultados llevan a los autores a pedir más investigaciones específicas por sexo para orientar la práctica clínica en materia de salud cardiaca.

Abstract: https://heart.bmj.com/content/early/2023/02/14/heartjnl-2022-321930