Salud Pública - Publicado el 23 de julio de 2019

Llaman a incorporar advertencias sanitarias en los envases de productos alimentarios

Llaman a incorporar advertencias sanitarias en los envases de productos alimentarios

El encuentro fue inaugurado por el secretario de Gobierno de Salud de la Nación Argentina, Adolfo Rubinstein, quien consideró que la obesidad y el sobrepeso “son el principal problema de salud pública” de Argentina. “Esta epidemia está afectando a la población más vulnerable. Y al grupo etario más vulnerable, los niños. Por eso, requiere una mayor protección por parte del Estado”, añadió la representante de la OPS en Argentina, Maureen Birmingham, durante la apertura.

Durante el encuentro, se presentó la experiencia de Uruguay, que incorporará las advertencias sanitarias en el frente de los envases de los productos alimenticios a partir de marzo de 2020. “De acuerdo a los estudios realizados, el sistema de advertencias con octógonos negros se identifica más rápido, se lee de modo más sencillo y es más claro, en comparación a otras propuestas de etiquetado, como el llamado semáforo o el conocido como GDA. Además, la gente le presta considerable atención, con lo cual creemos que va a tener un impacto en la elección de productos de los consumidores”, informó Maria Rosa Curuchet en representación del  Instituto Nacional de Alimentación de Uruguay.

Luis Galicia, del Ministerio de Salud de Uruguay, explicó que en total se hicieron 21 estudios académicos en los últimos cinco años y se analizó la evidencia internacional para la elección del sistema de etiquetado que logre resultados más efectivos en la población. Países como Chile y Perú también incorporaron el sistema de advertencias sanitarias en el frente de los envases con el objetivo de detener la epidemia de sobrepeso y obesidad.

En Argentina, el 61,6% de la población tiene exceso de peso, de los cuales el 36,2% de las personas tiene sobrepeso y el 25,4% tiene obesidad, según datos de la 4º Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR).

En estas jornadas, Rubinstein se refirió al lanzamiento del Plan Nacional de Alimentación Saludable en la Infancia y la Adolescencia (Plan ASÍ), que entre sus objetivos tiene la incorporación de marcos regulatorios para promover la alimentación saludable. Para ello, Salud está trabajando con la Secretaría de Comercio con el fin de contar con “un modelo que responda a los intereses de la salud pública y que marque el inicio del camino de cambio”.

En este sentido, la directora de Promoción de la Salud y Control de Enfermedades No Transmisibles, Verónica Schoj, explicó que la revisión bibliográfica realizada por la comisión asesora intersectorial del Programa de prevención de la obesidad indicó que el modelo de octógonos, equivalente al utilizado en Chile y Uruguay, demostraría ser el más efectivo en modificar la elección de los consumidores. Los mismos resultados habrían sido corroborados en estudios de investigación realizados por la Secretaría de Salud. 

“Esta epidemia de sobrepeso está conducida por la modificación de patrones alimentarios de la población: desde el consumo de alimentos naturales y comidas caseras hacia productos ultraprocesados con alto contenido de azúcar, grasa, sal y bajo valor nutricional”, sostuvo Maureen Birmingham.

“Estamos dejando a las niñas, niños y adolescentes desprotegidos frente a un entorno que los incita a adoptar hábitos que los perjudican tanto en su presente como en su futuro”, advirtió Sebastián Waisgrais, Deputy Representative, OIC a.i., UNICEF Argentina.

La actividad estuvo orientada a legisladores y asesores parlamentarios involucrados en la temática de la alimentación, la salud y los derechos del consumidor, en especial en relación a la protección de los derechos de niños, niñas y adolescentes. También formaron parte de la actividad decisores y equipos técnicos de las áreas de Gobierno afectados a las áreas de salud, regulación de la producción y comercialización de alimentos y protección de la niñez, además de organizaciones de la sociedad civil.