Patrones dietéticos y salud cerebral

Se identificaron cuatro subtipos de dietas aplicando análisis de datos sobre los gustos alimentarios de 181.990 participantes de la cohorte UK Biobank: “libre o reducida en almidones” (subtipo 1), “vegetariana” (subtipo 2), “alta en proteínas y baja en fibra” (subtipo 3) y “balanceada” (subtipo 4).

El subtipo 1 presentó mayor preferencia por las frutas, vegetales y alimentos proteicos, con menor afinidad por los almidones. El subtipo 2 se caracterizó por mayor preferencia por las frutas y verduras y menor gusto por alimentos proteicos. El subtipo 3 exhibió mayor preferencia por los snacks y por alimentos proteicos, con menor gusto por los alimentos vegetales. El subtipo 4 presentó equilibrio en las preferencias en todas las categorías de alimentos.

Estos subtipos presentaron variaciones en distintos campos de la salud cerebral. Los individuos con una dieta balanceada demostraron mejor salud mental y funciones cognitivas superiores en comparación con los otros subtipos.

Comparado con el subtipo 4, el subtipo 3 demostró menores volúmenes de materia gris en áreas como la circunvolución postcentral, mientras que el subtipo 2, mayor volumen en el tálamo y precúneo. Los análisis de asociación de genoma completo identificaron 16 genes diferentes entre el subtipo 3 y el subtipo 4, enriquecidos en procesos biológicos relacionados con la salud mental y la cognición.

Se observaron diferencias significativas en la salud mental y función cognitiva en los cuatro subtipos. Los individuos del subtipo 2, que consumían más verduras y frutas, presentaron mayores puntuaciones en scores de salud mental, como síntomas de ansiedad, síntomas depresivos, angustia mental, autolesiones y traumas, y una puntuación de bienestar relativamente más baja. Dada la naturaleza observacional del estudio, no puede establecerse que un patrón dietético vegetariano conlleve mayores problemas de salud mental.

El subtipo 3, que seguía un patrón dietético “rico en proteínas y bajo en fibra”, obtuvo puntuaciones de bienestar más bajas que los otros subtipos. Este hallazgo es consistente con publicaciones previas. En cambio, el subtipo 4, que seguía una dieta equilibrada y saludable, tenía menos problemas de salud mental y una puntuación de bienestar más alta que otros subtipos, lo que sugiere que una ingesta equilibrada de varias categorías de alimentos puede asociarse con una mejor salud mental.Las asociaciones entre los patrones dietéticos y la morfología cerebral y la integridad de la materia blanca son evidentes. En concreto, en comparación con el subtipo 4, el subtipo 3 tenía un volumen de materia gris significativamente menor en 11 regiones cerebrales, incluidas la circunvolución postcentral, la circunvolución parahipocampal, circunvolución parietal inferior, circunvolución temporal media, circunvolución cingulada media, entre otras. Estos resultados coinciden con investigaciones anteriores que vinculaban una dieta «más sana» (es decir, rica en verduras, vitaminas, antioxidantes y ácidos grasos poliinsaturados omega-3 o ingesta de pescado) con mayor volumen de materia gris total.